Alimentos curativos
El té verde prolonga la vida:A partir de ahora, sustituye el café y la Coca-Cola por una infusión que encuentras fácilmente en supermercados, herbolarios y tiendas naturistas: el té verde.
Consumido principalmente en China y Japón, es la versión sin fermentar del té negro que conocemos en Occidente. Al no tratarse, mantiene niveles más altos de flavonoides que el té negro, lo que le confiere propiedades antioxidantes, anti-inflamatorios y anti-carcinogénicas importantes.
En Oriente afirman que prolonga la vida y podría llegar a evitar la aparición o el crecimiento de ciertos cánceres de piel, pulmón y algunos órganos del aparato digestivo.
En la medicina China se viene utilizando para luchar contra el dolor de cabeza, la disentería, la tos, la gastroenteritis e incluso la hepatitis. Aumenta la capacidad de respuesta del cuerpo humano frente a las infecciones y está muy indicado para el tratamiento de herpes, verrugas y acné. Gracias a su acción sobre los radicales libres previene el envejecimiento celular y tiene una excelente función diurética y anti-grasa.
Uso medicinal del ajo:
Desde el Antiguo Egipto, el ajo ha sido utilizado a lo largo de la Historia hasta llegar a finales del siglo XIX, cuando Louis Pasteur demostró que el ajo es un antibiótico natural.
A partir de Louis Pasteur hasta la actualidad se han realizado diversas investigaciones, evidenciando que este alimento inhibe el crecimiento de microorganismos, por lo que ayuda a prevenir y combatir infecciones, tanto las víricas como las fúngicas.
Se han investigado las distintas propiedades del ajo, demostrando su efectividad crudo, para tratar enfermedades gripales, estomacales o reumáticas; y muchas otras enfermedades causadas por microorganismo, como la meningitis, la tuberculosis y el herpes simple.
Tomates:
La composición nutritiva de los tomates, bajos en calorías y en grasa, pero cargados de vitaminas A y C y de fibra, los hace uno de los mejores guerreros contra una de las enfermedades más mortales en la actualidad: cáncer.